A ninguna mujer le gusta pasarlo mal cuando se tienen amistades con su pareja, pero por ello no debemos de extraviar el buen humor, todo tiene solución. La clave es que la mujer le explique a la pareja hombre o madama qué hacer, cómo, con qué ritmo y en qué parte de su cuerpo.
Es importante dejar el cordón por fuera, como si fuese un tampón. Y, en parte, ese estrés viene dado por el ritmo de vida de muchas personas, con trabajos exigentes, horarios que cumplir, jornadas laborales acullá de casa, en algunos casos con hijos que atender. Por eso, señaló el especialista, un foco importante del tratamiento es normalizar la comunicación no solo antes y después del encuentro sexual, sino durante. Uso de productos de higiene íntima inadecuados, cambios hormonales o la menopausia son algunos de los condicionantes. No tengas miedo, no tiene que doler.
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