Esta frase combina palabras con ingenio para expresar deseo hacia otra persona. Que bonitos tus pantalones, como para verlos en el suelo de mi dormitorio.
Si apenas lo conoces y quieres usar un piropo para acercarte a él, elige uno sutil que no sea demasiado ascendente de tono y que resulte halagador. Una bonita y atrevida manera de usar esta cariñosa palabra. Los casos que he conocido, a partir de la experiencia que tuvo mi esposo, van todos por ahí. Seguro que lo sonrojas. Una locución muy significativa si eres de esas personas que no quiere salir nunca de la yacija. Tengo los ojos llenos de ganas de verte. Sorpréndelo a cualquier hora del día diciéndole este piropo sugerente y activista. Tienes la sonrisa que quiero para mis hijos. La adulterio siempre es una opción y siempre se puede decir " no ", pero lo que no tengo tan claro es que las personas de las que yo hablo quieran echar sus matrimonios por tierra.
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